Metal Gear Acid 2 (Metal Gear Ac!d² en el logo oficial, MGA2 abreviado) es un videojuego desarrollado por Kojima Productions y publicado por Konami para la PlayStation Portable. Fue dirigida por Shinta Nojiri, y producida por Noriaki Okamura y Hideo Kojima. Al igual que su antecesor Metal Gear Acid, se establece como parte de una franquicia separada y no canónica de la saga principal de Metal Gear. Metal Gear Acid 2 utiliza el mismo sistema que el MGA original; estrategia táctica por turnos basado en la utilización de cartas.
Argumentalmente extraño[]
El guión de Metal Gear Ac!d 2 se sitúa como una realidad alternativa a la historia principal de la saga, tanto que salvo el aspecto de Snake y la aparición del Metal Gear de su anterior entrega en PSP, podríamos estar ante un título totalmente independiente. El argumento comienza con nuestro héroe y tres nuevos compañeros escapando con un cuantioso botín de la República de Serena, tras derrocar un golpe de estado.
De vuelta a Estados Unidos un accidente ocurre en el avión y Snake se levanta amnésico, junto a Dalton, un agente del FBI que le obliga a infiltrarse en el complejo de StrateLogic Inc. a cambio del dinero y la libertad de sus amigos. Justo unos segundos antes de completar la misión una alarma general suena en el recinto, al parecer Thomas Koppelthorn, importante investigador de la compañía, se ha rebelado contra el presidente Rodzinski y amenaza a EE.UU. con la activación de un nuevo Metal Gear a no ser que les entregue una serie de personas involucradas en un turbio asunto.
Para controlar mejor la situación, Wiseman, un oficial del Pentágono, toma el control del barco donde está Dalton y presenta a Venus, su ayudante y nueva socia de Snake. Ahora su misión es recuperar el disco de datos del archivo Lucinda, relacionado con el Proyecto EGO y el nuevo Metal Gear. En el camino las cosas se tuercen un poco y tienen que luchar contra una serie de monstruos que servían como cobayas para la doctora Takiyama, a la que deben proteger para llegar a su objetivo.
Como en todos los Metal Gear, el argumento está lleno de falsas máscaras y los personajes siguen los estereotipos marcados por la saga, siendo la carga narrativa mucho más predecible, con un final más sencillo y dejando algunos enigmas en el aire. Incluso Snake resulta mucho menos carismático que en las entregas anteriores, actuando como una simple marioneta.